El huerto en mayo: sembrar y recoger.
Las plantas del huerto empiezan a competir por su espacio en este mes de mayo. Todas están en pleno crecimiento agradeciendo los días de sol y clima benévolo que les brinda esta temporada del año: la primavera.
Ahora es la temporada de recolección de habas.
Así como crecen las plantas que hemos sembrado y plantado, también es buen tiempo para el crecimiento de las malas hierbas. Algunas de éstas nos da pena arrancarlas como es el caso de las amapolas que se hallan en plena floración y dan un toque de color rojo vivo al campo.
A pesar de su belleza, las amapolas, son unas de las tantas malas hierbas que debemos quitar.
Continuamos con nuestra actividad de siembra y transplante, ahora más confiados en que ya no tenemos la amenaza constante de que nos toque una noche helada que nos estropee nuestros cultivos.
Algunas hortalizas ya están listas para recoger como es el caso de los guisantes, las habas, espinacas, acelgas, zanahorias, cebollas, etc.
Los tiernos y dulces guisantes ya están listos para ser cosechados.
Algunas plantas se alzan y florecen ante la llegada de la primavera, quedando su parte comestible inutilizada para el consumo, como es el caso de las remolachas, que al florecer su tubérculo se endurece. Algo parecido sucede con las coliflores y brócolis que desarrollan mucho tallo y merma su fruto. En estos casos conviene recogerlos cuando son más tiernos aunque su tamaño sea pequeño para evitar que se estropeen. Si decidimos no arrancarlas y dejarlas florecer nos quedaremos con un par de plantas para recoger sus semillas para la próxima siembra.
Las tomateras plantadas pronto necesitarán un tutor en el cual apoyarse, y además tendremos que eliminar las yemas que se formen en los ángulos de las hojas para reducir el crecimiento de la planta y, por el contrario, favorecer el crecimiento de sus frutos.
También tenemos que preparar los tutores de apoyo de los pimientos y las berenjenas y las redes para judías y pepinos.
Estamos en el mes óptimo de siembra y transplante de las plantas que recogeremos sus frutos en verano como son: tomates, pimientos, berenjenas, calabacines y pepinos.
Al igual que procedemos con el jardín, el huerto requiere que re-programaremos el riego automático otorgándole más tiempo de duración y más frecuencia de riego. Si no disponemos de él, entonces tendremos que estar más atentos a regar 3 veces a la semana si no llueve, intentando no mojar ni las flores, ni hojas, ni frutos para evitar la aparición de hongos como el mildiu.
Si teníamos instalados túneles o invernaderos, retiramos los plásticos y abrimos las ventanas de cristal para dejar pasar aire fresco.
Cuando el clima se torna más caluroso surgen ataques de pulgones y hongos. Si no se combaten de forma natural (mariquitas, crisopas, avispillas) podemos ayudar a mantener la salud de nuestras plantas pulverizándolas con un preparado de agua con jabón neutro para los pulgones y con azufre para el oídio. También al igual que con el jardín podemos hacer uso de una maceración de ortigas que mantendrá las plantas fuertes y ahuyentará a los insectos dañinos.
Los caracoles se reproducen rápidamente y devoran las plantas.
Otros devoradores del huerto y el jardín son los caracoles a los que tendremos que combatir con trampas enterrando vasos llenos de cerveza en la tierra, o bien con cenizas esparcidas o con cáscara de huevo machacada. Si no nos convence ninguno de estos métodos siempre podemos quitarlos uno por uno con la mano.
Al igual que en el jardín, en el huerto podemos aprovechar para hacer un alcolchado con cortezas, hojarasca, paja, etc. que mantendrá la tierra húmeda y favorecerá que no crezca mala hierba.
La albahaca ya puede pasar del interior de casa al huerto, ya que es la aromática más friolera y la última en abandonar la protección contra el frio. También podemos transplantarla directamente a la tierra, o incluso sembrar semillas directamente en el huerto cerca de donde estén plantados los tomates ya que conforman una asociación benéfica.
Planta de fresas con flores y frutos.
Y si nos gustan las fresas, aún estamos a tiempo de transplantar algunas plantitas compradas en un vivero. Elijamos las más grandes y las que ya tengan frutos.
